domingo, 27 de noviembre de 2011

Visitando bodegas Mustiguillo

Este fin de semana que cierra el mes de noviembre de este cálido otoño, hemos ido a visitar la bodega del Pago Finca El Terrerazo, se trata de la bodega Mustiguillo, la que elabora los vinos Mestizaje, Finca El Terrerazo y Quincha Corral, muy reconocidos internacionalmente.


La bodega se encuentra a pocos kilómetros del municipio de Utiel, en dirección Sinarcas, y allí se encuentra la finca que da origen a su Denominación de Origen Pago Finca El Terrerazo. Tras nuestra llegada estuvimos haciendo un poco de tiempo en las estancias, donde posteriormente efectuaríamos la cata de algunos de los vinos de la bodega.


Llama la atención que la finca está rodeada por algunos de los viñedos de los que se extrae la uva para elaborar los vinos, y que la distancia hasta la zona de elaboración es apenas de unos pocos minutos, con lo que cualquier entrada a la bodega puede hacerse con el mejor estado de sanidad de la uva.


El proceso de vinificación es totalmente artesanal, explico brevemente su propietario, Toni Sarrión, el pasado sábado en la bodega. La vendimia es manual y se efectúa en el mejor momento de maduración de las uva, seleccionándose en el propio viñedo los racimos que serán depositados en cajas de menos de 15 kg. que se transportan a la bodega. Al llegar pasan a maceración en frío en la cámara que precede a la mesa de selección.
 

Tras 24-36 horas la uva pasa a la mesa de selección de racimos, donde sólo pasarán a la desgranadora aquellos que cumplan con el estado sanitario apropiado para la obtención de un vino de calidad, tras el desgranado, otra mesa de seleción elegirá los mejores granos que pasarán a los depósitos de entre 5.000 y 8.000 litros, de roble o de acero inoxidable, para empezar a fermentar, haciendo remontados y bazuqueos diariamente con el fin de extraer el máximo a los granos de uva que entraron en la bodega.
 

Tras la fermentación alcoholica, por gravedad, los vinos de los depósitos pasan a una sala de barricas donde, con una sola línea de barricas, se controlarán una a una para dejar que realicen la fermentación maloláctica y depués pasar a dormir hasta su completa crianza. Entre 7 y 20 meses pasarán los vinos, fundamentalente provenientes de la variedad bobal, en las barricas francesas de 225 lts. hasta ser embotelladas, para que, tras su afinado en botella, salgan al mercado como vinos listos para beber ya o guardarlos hasta un lustro e incluso alguno de ellos algo más y conseguir que evolucionen perfectamente o alcancen la máxima madurez.


Una bodega técnicamente dotada de las últimas tecnologías, en el campo, en las labores de vinificación e incluso en el embotellado, pero que todos sus procesos son vigilados de forma artesanal desde la cepa hasta el embotellado, siendo la mano del hormbre quien realmente dirige y gestiona la cadena de cuidado de las cepas, vinificación, crianza y embotellado.



Un evento que terminamos catando el vino Mestizaje 2010 y el Finca El Terrerazo de 2005, ya que el de otras añadas más recientes se  encuentra agotado y que simbolizan la máxima expresión de los vinos de la variedad bobal de esta bodega.


viernes, 25 de noviembre de 2011

Entrega del I Premio Terroir


Ayer por la tarde fui invitado a la entrega del I Premio Terroir, que la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y del Medio Natural de la Universidad Politécnica de Valencia, que fue otorgado a la Bodega Mustiguillo reconociendo su labor en I+D+i sobre la uva bobal y elaboración de vinos de terruño.


Se contaba con la asistencia de D. Carlos Falcó y Fernández de Córdoba, marqués de Griñón y presidente de la asociación Grandes Pagos de España y a su vez propietario del Pago Dominio de Valdepusa, que hizo una ponencia sobre el terroir y los vinos de Pago, apoyado por una breve intervención del periodista y crítico de vinos Victor de la Serna, propietario también de la bodega Finca Sandoval perteneciente también a la asociación Grandes Pagos de España.


La Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y del Medio Natural premió a la bodega Mustiguillo por su labor en la elaboración de vinos con unas características especiales por su terruño y el trabajo realizado por Toni Sarrión, propietario de la bodega, que junto con su equipo, han conseguido que la uva Bobal sea perfectamente apta para producir vinos de calidad y que sus vinos gocen de reconocido prestigio internacional.

 
 
Permítanme que sea crítico con la concesión de este premio, creo que hay más de una bodega que ha trabajado la uva bobal de manera impecable, recuperando viejos viñedos de producción escasa y elaborando vinos de finca o de terruño que marcan la diferencia en una variedad muy difícil de trabajar. Alguna de estas bodegas que cito, trabajan desde antes de que lo hiciera Mustiguillo, con la uva bobal y la finca tiene también unas características especiales que ha hacen diferentes, de hecho no tiene nada que ver el mismo vino elaborado con viñas de la parte alta que con los de la parte baja.

 

Reconozco que Mustiguillo ha invertido en I+D y ha contado con un equipo trabajador e incansable por obtener la excelencia y la calidad, pero insisto en que se debería haber reconocido a otras bodegas, que pese a estar incluidas en la DO Utiel-Requena, han trabajado y luchado por conseguir vinos de calidad y reconociemiento internacional de la uva bobal, quizá con menos suerte o menos ‘prensa’ que la bodega ayer premiada.

 
Felicito a Toni Sarrión porque creo que hay que reconocer el mérito pero no es justo que otras bodegas que han conseguido, incluso antes que Mustiguillo, situar sus vinos de bobal en este mundo globalizado, no hayan sido reconocidas en este I Premio Terroir y que espero sigan trabajando para que los vinos de la Comunidad Valenciana sea reconocidos a nivel mundial por su calidad y excelencia.

 
Tras la entrega del premio se hizo una cata de los vinos que pertenecen  a la asociación Grandes Pagos de España y a los que referí en post anteriores a este.

domingo, 6 de noviembre de 2011

De nuevo Bodegas CUEVA...

Cuando encuentras gente amable y sencilla da gusto compartir un día, por horrendo, frío y lluvioso que sea y además dar a conocer a tus amigos personas que no conocerías sino fuera a través del mundo del vino. Hoy hemos decidido, en pleno domingo casi invernal y con premio MotoGP incluido, ir a Bodegas CUEVA.


Un grupo de amigos del colegio de mi hijo quería repetir la experiencia del enoturismo en una bodega pequeña y familiar y pensando en una de las bodegas más singulares, en una zona priviliegiada y con una gente que merece tener como amigos, pues hemos puesto dirección a La Portera, aldea de Requena, no sin antes rodear el monumental atasco que se forma en torno al Circuito Ricardo Tormo de Cheste, con motivo del final de temporada del mundial de motociclismo.


Al llegar a Requena hemos hecho acopio del embutido tradicional de la zona y de las viandas para poder hacer frente a un frío y desapacible día. Hemos llegado a la bodega cerca del mediodía y hoy nos hemos juntado con otras personas con las que hemos compartido una parrillada de embutido y cerdo, junto a un potaje de legumbres y verduras.


Hemos maridado con los vinos tintos barrica y selección de 2006 y 2007, vinos ecológicos 100% y que os recomiendo consigáis lo antes posible, ya que se agotan. Desde esas añadas no se han dado las condiciones específicas para producir éstos usando las técnicas ecológicas y conseguir vinos tan ilustres como estos que hemos probado ya en distintas ocasiones.


Tras la comida ha venido lo que denominamos inventos, como vinos totalmente naturales blancos de fermentación natural y que alcanzan una graduación superior a 20º de alcohol, secos y dulces, cavas de más de 6 años en rima degollados al instante con una cremosidad y un 'bouquet' excepcional y hasta destilados de jengibre, que solo pueden degustarse en la bodega.


En fin como siempre un placer compartir con la gente de Bodegas CUEVA, un fabuloso día en compañía, aunque metereologicamente horroroso.

jueves, 3 de noviembre de 2011

Club Torres, más que una red social

Hace un tiempo recibí una invitación para conocer el nuevo proyecto de bodegas  Miguel Torres, el Club Torres. Tras registrarme como usuario y participar en esta web, descubrí lo interesante que puede ser este tipo de iniciativas en el sector del vino.


Este espacio virtual aglutina un parque temático en torno a la cultura del vino. Hay tres apartados en su interior, cada uno dedicado a una temática, así pues, 'El Club' como tal es un blog destinado a dar a conocer las opiniones, noticias y novedades que se van generando en torno a la bodega, los vinos, personajes e incluso cultura vitivinícola. Interesante desde el punto de vista de la cultura del vino, ya que pretende ser un espacio corporativo relacionado con todo a lo que rodea a los vinos de Miguel Torres S.A.


'La Comunidad' trata de establecer una red social entre los miembros del Club Torres donde participar en grupos, hacer comentarios individuales, en general es un espacio de debate y opinión donde los aficionados al mundo del vino pueden establecer contacto en torno a temas comunes o de interés general.


La parte más didáctica de esta web la encontramos en 'El Taller', esta zona es de la que podemos aprender a través de los videos, cuestionarios, catas y glosarios e incluso participar aportando las impresiones personales de las catas de nuestros vinos favoritos.


Es por ello que considero este espacio una recomendada ocasión para disfrutar de la cultura del vino y conocer toda la actividad de esta bodega, junto con las opiniones de los usuarios que participan en ella y también, porque no, aprender nuevas cosas sobre este apasionante mundo del vino.